Obesidad en México: expertos explican los estigmas, causas profundas y los síntomas de alerta que revelan una enfermedad más compleja que el peso

La obesidad en México se ha convertido en una crisis sanitaria que avanza con rapidez. De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), más del 75% de los adultos y un 38% de los niños y adolescentes viven con sobrepeso u obesidad, posicionando al país entre los primeros lugares a nivel mundial. Sin embargo, especialistas advierten que este problema no puede evaluarse únicamente a través del peso, ya que involucra factores biológicos, psicológicos, sociales y económicos que afectan de manera profunda la salud de quienes la padecen.


El estigma: el enemigo silencioso que agrava la enfermedad

Uno de los factores menos visibilizados pero más dañinos es el estigma social asociado al peso. Este prejuicio afecta desde la infancia y se manifiesta en forma de burlas, discriminación laboral, exclusión social y sesgos en la atención médica.

Estudios del Instituto Nacional de Salud Pública revelan que:

  • Las personas con obesidad reportan tres veces más ansiedad y depresión.
  • El 58% evita acudir al médico por miedo a ser juzgado por su peso.
  • El estigma puede elevar el nivel de cortisol, la hormona del estrés, lo que favorece la acumulación de grasa abdominal.

Los expertos coinciden: la discriminación, lejos de motivar cambios, genera un daño emocional y metabólico que perpetúa la enfermedad.


Una enfermedad multifactorial: más allá de la idea simplista de “comer menos y moverse más”

La obesidad es catalogada por la Organización Mundial de la Salud como una enfermedad crónica, progresiva y multifactorial. Entre los factores que contribuyen a su desarrollo destacan:

1️⃣ Genética y metabolismo

  • Entre el 40% y 70% del riesgo de desarrollar obesidad está relacionado con factores hereditarios.
  • Alteraciones hormonales como la resistencia a la insulina y la leptina contribuyen a la acumulación de grasa.

2️⃣ Microbiota intestinal

Diversos estudios muestran que la composición bacteriana del intestino influye en la forma en que el cuerpo procesa grasas y carbohidratos, siendo clave en el aumento de peso y en enfermedades metabólicas.

3️⃣ Entorno alimentario

México es uno de los países con mayor consumo de ultraprocesados y bebidas azucaradas. Su bajo costo y amplia disponibilidad hacen que sustituyan alimentos nutritivos.

4️⃣ Estilos de vida sedentarios

La urbanización, el uso prolongado de pantallas y las largas jornadas laborales han disminuido significativamente la actividad física.

5️⃣ Salud mental y estrés crónico

La ansiedad, depresión y el estrés influyen en los patrones alimentarios y en la regulación hormonal, promoviendo el almacenamiento de grasa abdominal.

El conjunto de estos factores demuestra que la obesidad no depende únicamente de hábitos, sino de un entorno biológico y social complejo.


⚠️ Síntomas de alerta que no se reflejan en la báscula

Los especialistas destacan que existen señales tempranas que indican un deterioro metabólico incluso antes de que el peso sea alarmante. Ignorarlos puede retrasar tratamientos adecuados.

Síntomas metabólicos y físicos

  • Cansancio extremo, incluso después de dormir
  • Dificultad respiratoria al subir escaleras o caminar distancias cortas
  • Ronquido intenso o apnea del sueño
  • Dolor crónico en rodillas, espalda o caderas
  • Hinchazón persistente o inflamación abdominal
  • Sudoración excesiva y sensación de calor constante

Señales hormonales y cardiovasculares

  • Resistencia a la insulina
  • Aumento de glucosa y triglicéridos
  • Menstruaciones irregulares o síndrome de ovario poliquístico
  • Hipertensión arterial
  • Ritmo cardíaco acelerado ante esfuerzos mínimos

Indicadores emocionales

  • Ansiedad relacionada con la alimentación
  • Trastornos del sueño
  • Baja autoestima o aislamiento social

Identificarlos permite intervenir antes de que aparezcan complicaciones graves como diabetes tipo 2, hígado graso, apnea severa o eventos cardiovasculares.


El reto del sistema de salud: ¿Cómo atender una epidemia que crece sin pausa?

México enfrenta deficiencias en el diagnóstico oportuno. Muchos pacientes tardan años en recibir atención integral y, cuando lo hacen, ya presentan enfermedades asociadas.

Especialistas recomiendan:

  • Atención multidisciplinaria: médico, nutriólogo, psicólogo, endocrinólogo y fisioterapeuta.
  • Programas enfocados en educación alimentaria desde la infancia.
  • Políticas públicas que regulen ultraprocesados y bebidas azucaradas.
  • Estrategias de prevención en centros laborales y escolares.

Un cambio cultural necesario

Los expertos coinciden en que combatir la obesidad implica romper mitos, eliminar el estigma y comprender que es una condición médica, no un fallo personal.

Promover una cultura de respeto al cuerpo y salud integral permitiría que más personas busquen atención sin miedo a ser juzgadas, garantizando diagnósticos más rápidos y tratamientos más efectivos.


Con información de:

  • Secretaría de Salud de México
  • Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT)
  • Organización Mundial de la Salud (OMS)
  • Instituto Nacional de Salud Pública (INSP)

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